Bailando...

Y aquí termina, todo se reduce solamente a tu y yo.
Vamos forma parte de este fatídico baile, sigue el ritmo "un, dos, tres, un, dos tres".
No tengo prisa, para mi no hay un mañana y ayer es algo que ya he olvidado, solo tengo este momento, ¿no te sientes halagado de que lo estoy compartiendo?
Vamos, un paso adelante, dos atrás, agachas la cabeza y sonríes a tu pareja, no tan difícil, ¿o si?
Y llegó el momento, perdiste el ritmo y no queda de otra que intentar remediarlo, ¡oh! pero vaya sorpresa otro error, este baile ha terminado.
Y me retiro de la pista, con una sonrisa en la boca y un sentimiento de satisfacción, y en mi cabeza hay una frase que retumba "¿Quien sera mi pareja la proxima ocasión?"